La lámina galvanizada es un tipo de acero recubierto con una capa de zinc a través de un proceso de galvanización, diseñado para proporcionar una mayor resistencia a la corrosión y al desgaste. Este recubrimiento de zinc protege el acero subyacente de los efectos adversos de la humedad y los agentes corrosivos, prolongando su vida útil y mejorando su durabilidad. Las láminas galvanizadas se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones, incluyendo la fabricación de techos, revestimientos de paredes, estructuras metálicas, y componentes de vehículos y electrodomésticos.