Una cocina estilo minimalista se caracteriza por su diseño limpio, funcional y sin adornos innecesarios. Con líneas rectas y acabados simples, crea un ambiente moderno y ordenado. Los materiales comunes incluyen acero inoxidable, vidrio y superficies lisas como el laminado o el cuarzo. Los colores predominantes suelen ser neutros, como blanco, negro o gris, para crear una sensación de amplitud y tranquilidad. Este estilo de cocina se centra en la funcionalidad y la simplicidad, con un enfoque en la organización y la eficiencia en el espacio de trabajo.