Hay dos modelos de compresores a pistón abiertos: para refrigerantes de HCFC/CFC y para amoniaco. Dada su construcción abierta, permiten el uso de motores estándares mediante un acoplamiento directo al compresor o indirecto con correa. En caso de los abiertos lentos, se pueden utilizar mecanismos de poleas y bandas. Desde hace años, convencen por su fiabilidad y facilidad de mantenimiento.