La placa antiderrapante es un tipo de superficie metálica diseñada con patrones texturizados que proporcionan agarre adicional, incluso en condiciones húmedas o resbaladizas. Ideal para aplicaciones industriales, comerciales y residenciales, ofrece una solución segura y duradera para prevenir resbalones y caídas en áreas de alto tráfico. Su diseño resistente y de bajo mantenimiento la convierte en una opción versátil para una variedad de entornos.