Los bloques de construcción son unidades prefabricadas hechas de materiales como hormigón, arcilla, o madera, diseñadas para ensamblarse en muros o estructuras. Su forma regular y su tamaño uniforme permiten una construcción rápida y precisa. Se utilizan comúnmente en edificios residenciales, comerciales e industriales, y su versatilidad los hace adecuados para diversas aplicaciones, desde muros de contención hasta paredes divisorias y revestimientos exteriores. Los bloques de construcción a menudo se conocen por otros nombres, como ladrillos o bloques de hormigón, según el material del que estén hechos.