El principal propósito de la pasteurización de la leche cruda es el de “matar” por el calor los gérmenes patógenos que causan enfermedades al ser humano. La pasteurización industrial es un compromiso óptimo entre los pasos técnicos requeridos para lograr este fin (no patógenos) y conservan intactas las propiedades físicas y químicas de la leche.