La escultura “Piojitos” rinde homenaje a este juego arraigado en la memoria colectiva de los mexicanos. Está compuesta por una trilogía de piezas cuadradas que capturan las fases de este juego entrañable que todos conocemos desde niños. Busca enseñarnos que, así como en el piojito, donde cada elección desvela un mensaje oculto, nuestras decisiones en la vida se entretejen y construyen nuestro destino.

“Piojitos” no solo celebra la niñez y la magia de descubrir, sino que también destaca la importancia de reconocer que somos los arquitectos de nuestro propio futuro. Nos invita a abrazar nuestras decisiones presentes con la misma curiosidad y entusiasmo que teníamos de niños, recordándonos que el asombro es una fuerza poderosa que puede moldear nuestro camino hacia un futuro lleno de posibilidades.