Reducido tamaño, resultado de una larga experiencia constructiva y una constante mejora del producto.

Inmejorable aprovechamiento térmico, incorporando las resistencias sumergidas en agua.

Su diseño busca el equilibrio constante de velocidades del agua, favoreciendo un intercambio óptimo y un máximo rendimiento.

Accesibilidad a todos sus componentes y consecuente fácil mantenimiento

Flexibilidad de funcionamiento gracias al escalonamiento de potencias (hasta más de 10 etapas de potencia según tamaño de caldera)

El equipo estándar incluye la maniobra de control amigable –fácil de entender y manejar-, con protección diferencial y todas las seguridades reglamentarias y específicas de las calderas ATTSU.

El aislamiento térmico lo forma una gruesa capa de material de baja conductividad y alta densidad, recubierto por una envolvente metálica de acero inoxidable.