Estos sistemas de seguridad son especialmente adecuados para inmuebles de tamaño medio a grande, como oficinas, naves industriales y edificios comerciales, proporcionando una protección integral y confiable. Además, se recomiendan ampliamente para aplicaciones residenciales en casas en proceso de construcción o renovación, donde la instalación previa del cableado simplifica y acelera el proceso de implementación. Sus ventajas incluyen componentes disponibles a precios asequibles, la capacidad de integrar una amplia gama de detectores gracias a su función híbrida y la posibilidad de expandir el sistema mediante elementos adicionales a través de radio. Son altamente resistentes a las interferencias gracias a su vía de transmisión y ofrecen un rendimiento superior con un bajo costo de mantenimiento al funcionar con energía eléctrica.