Apague el sistema. Encuentre las unidades de tratamiento de aire y logre un buen acceso a los serpentines. Si hace falta, instale paneles removibles. Aspire las serpentinas y las aletas para eliminar los residuos secos. El CoilVac de 2 velocidades, diseñado para espacios reducidos, funciona como aspiradora y soplador y trabaja para alcanzar el polvo y la suciedad en todas las superficies. Asegúrese de que la bandeja y el conducto de condensado no estén obstruidos antes de comenzar la limpieza en húmedo. Los equipos de limpieza de alta presión pueden dañar las delicadas aletas y las unidades de alto flujo pueden desbordar las bandejas de drenaje. Un sistema ideal proporciona alrededor de 125 psi y 1/2 galón/minuto, como el CoilPro CC-JR. Rocie CoilShine que no es cáustico ni humeante y déjelo reposar de 3 a 5 minutos. La espuma espesa se adhiere a las serpentinas, dándole al producto químico un considerable «tiempo de permanencia» para aflojar los depósitos pegajosos de biofilm. Si es necesario, enjuague y repita. Trate el serpentín y el pleno con un inhibidor de moho registrado por la EPA, como CoilShine BC, para inhibir el crecimiento de moho y bacterias peligrosas. Limpie la bandeja de condensado y el conducto de drenaje. Use tabletas de biocida en la bandeja de drenaje para minimizar el riesgo de que se produzcan futuras obstrucciones e inundaciones. Reinicie el sistema.